La fuente inagotable

Hace un par de horas leía la traducción del libro Tao Te Ching del célebre maestro taoísta Lao Tse. En una de sus reflexiones, encaminada al corazón humano, Lao Tse escribe lo siguiente:

Igual que el lecho de un río, el corazón nunca se llena.

Este breve poema o reflexión me ha hecho pensar en el camino de la simplicidad. Actualmente las personas aspiramos a tener más bienes materiales, siendo este un síntoma del consumismo desenfrenado y la mercadotecnia aspiracional. Los esfuerzos de las grandes corporaciones se han enfocado en crear una publicidad repleta de falsos íconos, con esto me refiero a los modelos que se han implantado con respecto a la belleza, al bienestar, incluso a la felicidad.

El corazón nunca se llena, ha dicho Lao Tse. Al igual que Lao Tse, creo que el deseo de ambición es como el lecho de un río. Jamás nos sentiremos satisfechos. El consumismo es el culpable. Querer más.

Por eso los invito a conformarnos. A aceptarnos como somos y con lo que tenemos. Ser felices, porque jamás llenaremos esa sensación. La armonía es equilibrio, balance.

Practiquemos el minimalismo, porque menos es más, menos es mejor.

Tener límites es favorable. En este sentido no estoy de acuerdo con los gurús que nos alientan a querer más, a tener más. Porque tener más significa aspirar a más.

Seguramente muchos de ustedes piensan "este tipo es un mediocre". Pero no. Solamente me he propuesto tener límites.

Los invito a practicar la simplicidad y el minimalismo, les garantizo que van a sentirse satisfechos.

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